Los paisajes de Kenia
Kenia es un país precioso. No solo es sorprendente por su fauna, sino también por su increíble diversidad paisajística. Aquí encontrarás desiertos, selvas tropicales, bosques y mucho más. A continuación te hablamos de algunos de los lugares más emblemáticos.
El Gran Valle del Rift
El Gran Valle del Rift es una grieta tectónica que está en proceso (muy muy lento) de dividir el continente africano en dos. La grieta comienza en el norte de África y atraviesa Etiopía, Somalia y Kenia hasta llegar a Tanzania y Mozambique. En Kenia, el Gran Valle del Rift va desde el lago Turkana hasta el sur, atravesando el distrito de Laikipia, el Parque Nacional de Aberdare, Ol’ Pejeta Conservancy, el Parque Nacional del Lago Nakuru y el del Lago Naivasha, y la Reserva Nacional de Masai Mara, para después adentrarse en Tanzania. Crea un paisaje asombroso lleno de carreteras sinuosas, calderas y volcanes inactivos, colinas, montañas, bosques tropicales y múltiples lagos alcalinos, como el lago Nakuru. Las algas que cerecen en el agua salada atraen a miles de flamencos cada año. Cuando planifiques tu safari, asegúrate de incluir al menos algunos de los parques en los que se cuentra el Gran Valle del Rift, es algo digno de ver y que no te dejará indiferente.
Sabana
El paisaje más característico de África es probablemente la sabana, llena de elefantes, leones, rinocerontes, jirafas, cebras y muchos otros animales deambulando por ella. Las sabanas son enormes llanuras con hierbas largas y pardas y algunos árboles y arbustos dispersos. La Reserva Nacional de Masai Mara es probablemente uno de los lugares más famosos del mundo por tener este tipo de paisajes, pero también por formar parte del recorrido que sigue la Gran Migración de ñus y cebras cada año. Es un espectáculo de la naturaleza que tienes que ver con tus propios ojos al menos una vez en tu vida. Otros parques que puedes visitar en Kenia con paisajes similares y que dan hogar a los Cinco Grandes son los parques nacionales de Tsavo East, de Tsavo West y de Amboseli y la Reserva Nacional de Samburu.
Montañas y cráteres
Irónicamente, la montaña más famosa de Kenia, el Monte Kilimanjaro, se encuentra en realidad en territorio tanzano, pero como es visible desde varios lugares de Kenia, a menudo se confunde con una montaña keniana. De hecho, una de las mejores vistas al Kilimanjaro solo se puede disfrutar en Kenia, en el Parque Nacional de Amboseli, para ser exactos. Es muy probable que sea por esto por lo que se genera tanta confusión.
La montaña más alta de Kenia, por su parte, es el Monte Kenia, que se encuentra en el centro del país. Después del Monte Kilimanjaro, es el pico aislado más alto de todo el continente. Es posible escalarlo, pero para llegar a los picos más altos (Bantian y Nelion) es necesario realizar escalada en rocas bastante empinadas y hacer rápel. No obstante, hay varias rutas de senderismo hasta los picos más bajos para las personas interesadas en escalar esta hermosa montaña. La ruta Sirimon, por ejemplo, es una caminata de cinco días que va hasta el pico Lenana.
Kenia también cuenta con algunas cordilleras, siendo la de Aberdare la más famosa, situada en el parque del mismo nombre, un lugar repleto de cascadas al que te recomendamos encarecidamente que vayas. En Taita Hils y en el Gran Valle del Rift, por su parte, podrás encontrar otras cordilleras más bajas, pero con unas laderas preciosas. En el Valle del Rift también hay volcanes calerdas inactivos, como el Monte Longonot y el cráter de Menegai, que también tienen unas rutas de senderismo espectaculares.
Desiertos
Kenia alberga dos desiertos: Nyiri, que se encuentra al sur del país (cerca del Parque Nacional de Amboseli), y Chalbi, situado en el norte del país, cerca de la frontera con Etiopía y del lago Turkana. El desierto de Chalbi tiene más de 100 000 kilómetros cuadrados de superficie y, durante el día, alcanza unas temperaturas que oscilan entre los 43 y los 46 ºC.
El desierto de Chalbi es conocido por su impresionantes belleza natural, sus imponentes dunas de arena, sus antiguos flujos de lava y sus montañas volcánicas, todo ello rodeado del lago de agua dulce Turkana. Pero eso no es todo, como todo buen desierto, también cuenta con un oasis, el oasis de Kalacha, que se encuentra a varios días andando de las zonas de pastoreo más cercanas. Se trata de una zona hermosa y verde que sirve como punto de encuentro para camellos, ganado, burros y cabras. Además, el desierto es el hogar de las tribus nómadas de Kenia restantes, como los turkana, los samburu, los marakwet, los pokot, los El Molo y las tribus gabbra. Es un destino ideal para las personas que vengan con un poco de tiempo extra.