Una semana tan diversa como el propio país.
Comienza en Tshwane (antigua Pretoria), una ciudad con mercados, centros comerciales y música en cada esquina. A pocos minutos se encuentra la Reserva Natural de Groenkloof, un lugar ideal para combinar senderismo y safari; recorre sus senderos entre paisajes escénicos y tramos más abruptos y súbete a un vehículo de safari para avistar cebras, jirafas, kudús, avestruces o chacales, entre otros.
Si no quieres irte del país sin ver a los Cinco Grandes en libertad, visita el Parque Nacional Pilanesberg. Y para una experiencia aún más especial, sobrevuélalo en globo aerostático: 550 kilómetros cuadrados de naturaleza bajo tus pies, con vino espumoso y desayuno inglés incluidos, ¿qué más se puede pedir?
El viaje termina en Magoebaskloof, una región de bosques, cascadas y jardines que parece sacada de un cuento. Visita el encantador pueblo de Haenertsburg, pasea por el bosque, lánzate por tirolina o relájate en sus cafeterías y bares. Sea cual sea tu elección, este rincón de postal pondrá el broche final a tu viaje de ensueño.
Todo el encanto de Sudáfrica en un solo viaje.
Puedes recorrer esta ruta a tu aire, conduciendo tú mismo o, si lo prefieres, viaja con uno de nuestros guías, que te mostrará los rincones más especiales y te contará todo lo que no aparece en las guías.