Sal de Johannesburgo y pon rumbo a Tshwane (antigua Pretoria), una ciudad más tranquila que Johannesburgo pero con planes de sobra. Por la N1 son unos 45 minutos —menos de 60 kilómetros— hasta la capital administrativa del país. En primavera, más de 40000 jacarandas tiñen las calles de morado; de ahí su apodo de «la ciudad jacaranda». Al llegar, puedes hacer el check-in y recuperar fuerzas o salir directamente a explorar la ciudad.